Los Alcázares

Para todos:familia, novios, visitantes

El sol se cuelga en el cielo mientras empieza a despertar las playas de finos arenales del Mar Menor. Los miles de colores se reparten por Los Alcázares creando uno de los amaneceres más espectaculares de Murcia. Son los madrugadores, los únicos, junto a los marineros que faenaban, los que han tenido el placer de contemplarlo, pero no importa, mañana habrá más. Da igual que sea invierno o verano, en Los Alcázares el sol nunca defrauda. Tras unas horas, sus siete kilómetros de playas reciben a los visitantes: familias, amigos o parejas quieren disfrutar del agua templada de la manga en los distintos arenales que abarcan desde Los Narejos hasta Punta Brava. Otros, amantes de la tradición, han preferido recorrer el puerto, saborear un rico ‘caldero’ con vistas al mar o empaparse de la tradición hortense de la villa en la Semana Internacional de la Huerta y el Mar. Los más estresados, no han elegido Los Alcázares por casualidad, saben de las excelentes propiedades de sus aguas, que ya utilizaron los romanos en las antiguas termas y que ahora algunos balnearios de la localidad emplean en sus tratamientos. Sin embargo, aunque Los Alcázares a primera vista parezca un sitio para relajarse –aguas termales, playas kilométricas, excelente gastronomía marinera y de la huerta, el deporte se exhibe como un atractivo esencial de la villa. El Mar Menor, cálido, calmado y poco profundo es uno de los lugares más valorados de España para realizar regatas, además de ofrecer la práctica de todo tipo de deportes náuticos durante todos los días del año (vela, piragüismo, windsurf, kitesurf, padelsurf, etc.) Así, Los Alcázares se corona como una de las reinas de la ‘Manga’ con chiringuitos para disfrute de visitantes de todas las edades y como un príncipe que lucha por mantener hegemonía y prestigio adquiridos a lo largo de los años: el Mar Menor.