Escapada a Coirós y Betanzos (A Coruña)

Naturaleza y buena mesa en el rural coruñés

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19/11/2024 –

Actualizado: 14/11/2023

Rodeado de verdes campos, iglesias y cruceiros, viajar a Coirós es empaparse de la magia rural de A Coruña. Situado muy cerca de Betanzos, Coirós ofrece muchas razones para visitarlo, entre ellas, la primera estación de servicio Repsol con combustible 100% renovable en Galicia.

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Encajonado entre los ríos Mendo y Mandeo, la ubicación de Coirós lo convierte en uno de los lugares predilectos para disfrutar del rural de A Coruña. Además de los clásicos cruceiros que pueblan esta tierra, entre su patrimonio histórico hay que destacar la gran cantidad de iglesias románicas que se han conservado en los límites del concello: las de Santa María y Santiago de Ois, San Xulián y, con el argumento añadido de uno de los mejores miradores de la comarca, la de Santa Eulalia de Espenuca reflejan el valor que se ha dado a estos inmuebles religiosos en la cultura popular gallega. Es en este particular paraíso rural donde Repsol ha inaugurado la primera estación de servicio con combustible renovable 100% en Galicia producido a partir de residuos orgánicos y aceite de cocina usado. Si visitas Coirós, puedes encontrarla en el kilómetro 558 de la A-6.

La práctica del senderismo es otro de los grandes polos de atracción turística de la localidad, ya que en los alrededores discurren diversas rutas en las que observar cómo el clima de esta parte de Galicia hace que el verde de los montes domine la panorámica durante todos los días del año.

Una de las favoritas para quienes conocen la zona es la que comienza en el Área Recreativa de Chelo, conocida como Ruta do Bocelo. El camino ya atrapa desde el principio, sobre todo si se entra en el Centro de la naturaleza junto al inicio del camino, pues en él se detallan todas las particularidades de la vegetación autóctona que crece al pie del Monte de la Espenuca, espacio declarado como paisaje pintoresco y que tiene en el Roble centenario de Chelo el ejemplo paradigmático de las bondades de este entorno. Durante el recorrido, compartiendo paso con el Mandeo durante largos tramos, se descubre la presa da Cabra y las antiguas ruinas de unos balnearios.

A un paso de Betanzos

A menos de diez minutos en coche desde Coirós se encuentran tanto el Puente Viejo -siglo XIII- como el Puente Nuevo -siglo XIX- de Betanzos, invitando al turista a traspasar las murallas que dan la bienvenida a su núcleo medieval. La localidad gallega conserva el recinto amurallado con más puertas de toda la comunidad autónoma y se sabe de su existencia desde el siglo XIII.

Betanzos, una joya monumental. Foto: Fuco Reyes

Sin embargo, esto es solo la primera muestra de su rico casco antiguo, donde pazos como los de de Bendaña, de Lanzós y de los Condes de Taboada se intercalan con inmuebles religiosos de enorme valor artístico como el convento de las Agustinas Recoletas, construido en el siglo XVII, iglesias góticas de Santa María del Azougue y San Francisco o ilustres como la Casa Consistorial, diseñada por Ventura Rodríguez a finales del siglo XVIII, y el Archivo-Liceo, construido en 1764 para ser Archivo del Reino de Galicia aunque nunca llegó a tal fin.

Además, quien pasea por estas calles no puede abandonarlas sin haber probado la humilde y característica tortilla de Betanzos. Como indica Pepa Miranda, del ‘Casa Miranda’, “tiene que llorar” y, a ser posible, consumirse recién hecha como en el ‘Mesón O’Pote’, donde no pasan más de diez minutos desde que se sirve en la mesa hasta que se acaba. Quienes quieran probar otras delicias de la zona, en el restaurante ‘La Casilla’ (Recomendado por Guía Repsol) cuentan entre sus estrellas, además de la tradicional tortilla, con sus callos y la carne asada y, a la hora de disfrutar de buenos pescados, en el restaurante ‘San Andrés’ (Recomendado por Guía Repsol) se han labrado su buena reputación a base de platos de bacalao al modo de la abuela o al del tío Xoan y magnífico rodaballo San Andrés.

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