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Movistar+ presenta la serie Paraíso, un cóctel explosivo de crímenes, fantasía y misterios inexplicables que lidera el director Fernando González Molina. La desaparición de tres chicas durante el verano de 1992 pone patas arriba la tranquila vida de los habitantes de Almanzora de la Vega, una localidad de la costa mediterránea que empieza a ser escenario de sucesos cada vez más inexplicables.
Los responsables de esta nueva producción han tenido que crear desde cero este pueblo ficticio donde ocurre su acción principal. Y eligieron la Comunidad Valenciana para hacerlo. Almanzora y sus alrededores son el resultado de un compendio de varios municipios de la región que destacan por sus entornos marítimos y naturales, típicos de la zona, ambientados para la ocasión al estilo de los años 90.
"Almanzora de la Vega es un pueblo idealizado, uno de esos lugares de veraneo que existían hace 30 años en España", explica Antón Laguna, director artístico de la serie, que cuenta cómo el guión hablaba de un pueblo levantino sin concretar y que, tras valorar otros lugares, optaron por servirse de algunos de los maravillosos espacios y rincones de la Comunidad Valenciana.
Altea (Alicante) fue la localización base para Paraíso. Esta villa y su bahía se pueden apreciar en muchos momentos a lo largo de sus siete capítulos. Por ejemplo, en sus numerosos planos aéreos grabados con dron. Gracias a ellos podemos hacernos una buena idea de la fisonomía de Altea: vemos desde arriba los tonos blancos de sus casas, su zona marítima, la cúpula azul de la iglesia de Nuestra Señora del Consuelo o las montañas que lo rodean, como la Sierra de Bierna o el reconocible Peñón de Ifach.
Si bajamos a la tierra, hay más de Altea en la Almanzora de Paraíso. En la parte alta del pueblo está la casa de Mario (Iñaki Ardanaz) y Javi (Pau Gimeno), las secuencias de la Escuela de Vela son en el Puerto y también podemos ver el agua desde la costera Carretera del Albir o en la Playa de la Olla, donde se rodó la casa familiar de Zeta (Héctor Gozalbo) y una destacada escena entre el propio Zeta y Álvaro (Cristian López).
El otro lugar esencial para construir la nostálgica Almanzora de la Vega fue El Perelló (Sueca), que está en una zona "muy poco tocada que mantiene el espíritu del boom del turismo de los 70", según Laguna. La calle principal y varios detalles del interior del pueblo son, en realidad, de esta localidad valenciana. El bonito paseo marítimo de Almanzora –y su cabina–, el exterior del cuartel de la Guardia Civil o distintos comercios también se rodaron aquí.
Si salimos en bicicleta del centro del pueblo seguimos viajando por la provincia de Alicante. Varios de los entornos naturales que vemos en las inmediaciones de Almanzora pertenecen al Parque Natural de la Sierra Helada, que abarca Benidorm, Alfaz del Pi y Altea. Aquí vemos detalles de su carretera empinada bordeando la costa (Ruta a la Punta del Cavall) o el mencionado Peñón de Ifach.
En Sierra Helada se rodaron también unas impresionantes secuencias de roca y cuerda que se pueden distinguir por la Ruta del Faro del Albir. También se distingue en varias ocasiones en Paraíso otro faro que está un poco más lejos: es el Faro del Cabo de San Antonio, en Jávea, localidad donde también se rodó una secuencia en lancha (Cala del Moraig) con Costa (Macarena García).
Si seguimos bajando la costa, pasada la ciudad de Alicante, llegaremos a Santa Pola, lugar elegido para ambientar distintas secuencias de la serie. Aquí se ubicó el bar-restaurante de la familia de Quino (León Martínez) y, sobre todo, las escenas de la feria del capítulo 4, que se reprodujo y atrezó en el Pola Park.
Otra de las localizaciones que más lucen para recrear las inmediaciones de Almanzora es Chilches, ya en la provincia de Castellón. Además de una secuencia de descubrimiento entre rocas, en el capítulo 3 de Paraíso, podemos apreciar con calma uno de sus emblemas: su pasarela.
Una presa de más de 100 metros marca los límites territoriales de Almanzora, donde aparecen los carteles de despedida del municipio. En realidad se trata del embalse de Contreras que, curiosamente, separa la Comunidad Valenciana de Castilla La Mancha.
Y cuando en la serie van en coche y vemos cúmulos de agua y arena a los lados de la carretera estamos, por supuesto, en el fundamental Parque Nacional de la Albufera (Valencia), una de las visitas imperdibles si vamos a la capital de la Comunidad.
Además de por los municipios ya mencionados, el rodaje de Paraíso también pasó por Calpe, Almusafes, Oliva –cuando ponen carteles al principio de la serie–, Requena –las cuevas que aparecen en la serie– o Villargordo del Cabriel en este fantasioso viaje por la Comunidad Valenciana.
Para completar todo el universo de Paraíso el equipo de la serie también estuvo en otras comunidades. La discoteca 'Paraíso', además de en plató y en algunos planos en Altea, se construyó como un gran decorado en Chinchón (Madrid). "Encontré ahí una explanada en una finca privada que tenía mucha fuerza. Segamos un campo entero, lo aplanamos, lo aramos y lo aplanamos otra vez para hacer el parking, por ejemplo. Era un sitio que no existía", comenta Antón Laguna.
La Comunidad de Madrid sirvió también para distintos interiores y platós, que se utilizaron y decoraron para ambientar esta historia en la que cada vez se plantean más incógnitas de lo que realmente está ocurriendo en Almanzora. Uno de los edificios que se utilizó fue, por ejemplo, el Antiguo Centro Emisor de Radio Nacional (Arganda del Rey).
Además, en Paraíso hay otro centro dramático sin ubicación concreta. Un gran e inquietante edificio lleno de oscuras prácticas. Los exteriores de estas partes de la serie se rodaron por un lado en El Espinar –y, en un interior, en la Academia de la Artillería (Segovia)– pero también en el relajante'Balneario Termas Pallarés' (Alhama de Aragón, Zaragoza).
Este fantasioso regreso al pasado, una serie original de Movistar+ producida en colaboración con The Mediapro Studio, empieza a partir del 4 de junio. Será una experiencia llena de preguntas sin respuesta con la que desempolvar nuestros viejos casetes.